La semana pasada ha sido una gran semana para el mundo Fintech en Argentina con el reciente anuncio de Ualá. La firma anunció una nueva y aparentemente inocente función: cobrar el sueldo a través de su plataforma. Esta semana Mercado Pago aumentó la apuesta también, permitiendo transacciones con dólar MEP. Mas que simples innovaciones estas noticias son un triunfo cultural, que reconoce que detrás del cambio tecnológico, hay nuevas cadenas de valor y una ontología de procesos, nueva y en constante cambio, difícil de captar y de sumarse a ella desde el edificio de la banca tradicional.
En Brasil, Nubank ha revolucionado el sector con propuestas innovadoras. En México, Clip está transformando la forma en que los pequeños empresarios procesan pagos; en India, Paytm está redefiniendo el comercio electrónico con su enfoque en pagos móviles. En Chile, la innovación comenzó con Cuenta RUT, algo asi como una billetera universal, y que ha permitido ampliar la base económica del país. Luego le siguió MACH dirigido a los segmentos más jóvenes, apuntando a simplificar la relación con el dinero, impulsando la educación financiera y con una oferta 100% digital.
Una historia similar, de sintonía con el cambio cultural, y tecnológico, son OnDeck, con sus préstamos para pequeñas empresas; Roostify, con su oferta hipotecaria; SoFi, conocida por sus servicios de refinanciamiento, préstamos y gestión de patrimonios, utiliza un algoritmo que considera factores más allá de los ingresos y el historial crediticio, incluyendo educación, carrera y flujo de efectivo estimado. Klarna con su aplicación revolucionó los pagos de compras en línea, ofreciendo opciones como pagos en cuotas sin intereses y planes de financiación de seis a 24 meses. Upgrade que provee de préstamos personales y servicios financieros en línea, que también ofrece tarjetas de crédito, cuentas corrientes y de ahorros, y monitoreo de crédito. Valon, que ayuda a los propietarios de viviendas con el servicio de hipotecas, proporcionando opciones como encontrar préstamos adecuados, refinanciar y aprovechar el capital de la vivienda. Imposible dejar fuera a GoodLeap, especializada en mejoras sostenibles del hogar, incluyendo financiamiento de conversión a energía solar de casas. Utiliza su motor de suscripción para acelerar los procesos de aprobación y ofrecer planes de pago flexibles. Por último, Spiff, que automatiza los pagos de comisiones, simplificando los flujos de trabajo para los equipos de ventas y asegurando que los representantes de ventas sean pagados correctamente y a tiempo.
Estos ejemplos, sirven para describir que las oportunidades, son múltiples, cuando ya se cuenta con una base de clientes cautiva importante que aportan el gran elemento: data.
La siguiente parada en esta ruta fintech es el negocio del crédito. Con un activo valiosísimo como la data, ¿quién mejor que una fintech para evaluar el riesgo crediticio de sus clientes o entender sus preferencias de consumo? Esto les permitirá tener perfiles muy exactos de sus usuarios, un conocimiento profundo de su comportamiento de pago. Mientras construyen estos repositorios de datos, se preparan para entrar con ventaja en la administración de portafolios de inversión, tanto privados como de fondos de pensiones.
También les permite incorporar oferta de seguros; volver a la carga con su oferta crypto, en cuanto la regulación lo permite, que tal vez hasta incluya un mercado interno de activos tokenizados que permita monetizar de manera desintermediada bienes y servicios, adelantando un negocio de factoring y confirming, abierto a pequeños empresarios.
No nos olvidemos de los dispositivos tecnológicos de alto valor. ¿Habrá mejor canal de distribución de marketing para productos como iPhones y otros de alto valor? Con la venta de estos productos de lujo llegarán las ofertas de créditos a largo plazo, paquetes turísticos y créditos automotrices. ¡Data rules!
Puedo entender la reacción de la banca tradicional: se dan cuenta de que perdieron la carrera de la innovación y el cambio cultural, antes de escuchar la siguiente charla sobre transformación digital. La innovación tecnológica es imparable, y buscar soluciones incrementales y graduales, puede dar como resultado escribir en piedra que perdieron, para siempre, sus cuotas de participación que alguna vez tuvieron. Solo les queda a aquellos bancos que queden vivos, re-encantar a ese público tradicional, buscar algún nicho, donde aún puedan hacer alguna diferencia, o competir. ¡Auch!
Por Miguel Papic, para Perfil/Noticias
Fotos: cortesía PSP y Fin.go